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Uno de los aspectos más importantes para entender por qué decae la convivencia intergeneracional, es la vivienda. Según el trabajo, los mayores son conscientes de que no pueden pedirle a sus familiares que se instalen en sus casas, por lo deberían de ser ellas quienes se reubicasen con ellos. Y esto conllevaría, muy probablemente, a la salida definitiva del hogar donde llevan mucho tiempo viviendo.
Ellos mismos piensan, que si compartieran el hogar con familiares significarían una carga para ellos, y es algo que quieren evitar a toda costa. Suelen rechazar esta idea, porque muchos creen que se entrometerían en su vida privada, y tampoco quieren quebrantar la intimidad. Por lo que temen que el transcurso diario de la convivencia acabase generando irremediablemente malestar, discusiones y conflictos, con los familiares o personas de su alrededor.
Cuando llega la jubilación, aquello con lo que tantos soñamos, pensamos que conseguiremos una vida tranquila, pero muchas veces nos sentimos solos.
Con la edad, las carencias físicas van apareciendo, sin dejar de lado las mentales, y surge así una falta de independencia. Esto provoca a las personas mayores un estado de baja autoestima. También, empiezan a echar de menos las rutinas y sus quehaceres, y así aumenta el sentimiento de soledad.
Otro factor, son las personas viudas tienen que asumir roles y experiencias por primera vez que se les hacen muy duras, en un primer momento, además de la soledad. La adaptación es muy difícil, pero pasado un tiempo valoran también mucho la libertad. Esa libertad crea al mismo tiempo la soledad en personas dependientes.
Los familiares no pueden cubrir esas carencias y crean una desatención hacía los ancianos. La mejor opción en estos casos es contratar un profesional de cuidado a domicilio.
Para evitar la soledad de los mayores, se puede hacer mediante la participación en asociaciones culturales, hogares del pensionista… Hay numerosas organizaciones en las cuales las personas mayores pueden sentirse útiles, realizando actividades que les pueda gustar. Así también, se hacen compañía unos a otros.
En el caso de las personas dependientes, las capacidades físicas son limitadas y se necesita una atención especial. Para evitar que se sientan solas es importante visitarles, ayudarles en sus tareas diarias, e incluso salir a pasear con ellos.
El servicio atención domiciliaria le proporciona al usuario los cuidados necesarios para la realización de las actividades básicas de la vida diaria sin tener que salir de su vivienda. Es decir, en tareas de cuidados personales y de limpieza. En Mejor en tu Casa le aliviamos en su situación personal para los cuidados de personas mayores y/o en situación de dependencia y tareas del hogar e internas.
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